Deportes de invierno: 7 recomendaciones para evitar lesiones

El Dr. Carlos Lupotti, médico traumatólogo especialista en miembro superior, nos cuenta cuáles son los traumatismos más frecuentes y nos brinda consejos para realizar actividades en la nieve sin inconvenientes.

Practicar deportes trae numerosos beneficios para la salud, pero también nos expone a sufrir algún tipo de lesión si lo hacemos en forma imprudente, sin la técnica adecuada o sobrexigiendo al cuerpo. En el caso de los deportes de invierno, la mayoría de los traumatismos se producen por caídas o choques entre esquiadores o con árboles, por falta de experiencia o por técnicas deficientes, y el 55% de ellos ocurren durante los primeros siete días de aprendizaje.

 

Las lesiones más frecuentes en los miembros superiores son:

  • esguinces en los dedos pulgares por caer sobre la mano con el puño, agarrando el bastón;
  • torceduras de codo o luxaciones de hombro, cuando la actividad se desarrolla a mayor velocidad o cuando la pista se encuentra en forma de hielo;

  • fracturas de antebrazo, de muñeca o de escafoides por caídas y contusiones.

Para prevenirlas, el Dr. Carlos Lupotti (M.N. 82.204), médico traumatólogo especialista en miembro superior, nos brinda consejos para minimizar el riesgo al practicar deportes de invierno.

 

7 recomendaciones para evitar lesiones

 

1 – Lográ una buena preparación física.

 

Para iniciarse en el esquí o snowboard, es primordial tener una buena condición aeróbica, una musculatura fuerte, articulaciones estables con buena amplitud de movimientos y, sobre todo, una muy buena elongación. Para ello, se aconseja que los entrenamientos se realicen durante todo el año, ya que hacerlo en forma intensiva durante solo un período antes de comenzar la práctica puede provocar lesiones.

Hay una antigua regla de los tres de la Sociedad Internacional de Traumatología del Esquí y Medicina de los Deportes de Invierno (SITEMSH) para quienes practiquen en forma ocasional:

"No esquiar más de tres horas, más de tres días seguidos o después de las 3 PM”.
 

2 – Tomá clases para aprender la técnica y mejorarla.

 

Si sos principiante, comenzá con un instructor autorizado. Luego, a medida que domines la técnica, podés perfeccionarla a través de prácticas con un monitor especializado. 

 

3 - Verificá que los equipos de esquí o snowboard estén en buen estado.

 

La calidad y el mantenimiento de los elementos propios o de alquiler deben ser óptimos. Las fijaciones deben estar ajustadas y reguladas por un especialista, según el estatus de cada persona. Además, utilizar la indumentaria para nieve evita enfriamientos en los músculos.

 

4 - Usar protección para evitar lesiones oculares, craneales y cutáneas. 

 

Usá casco para no sufrir traumatismos de cráneo y de columna cervical, gafas con cristales con protección UVA para sortear lesiones de córnea y cremas con filtro solar para cuidar la piel ante eventuales quemaduras de sol en las manos, la cara y los labios. En estos productos, leé atentamente las etiquetas y asegurate de que no contengan parabenos entre sus componentes.

 

5 – Entrá en calor antes de cada salida a la pista.

 

Empezá con ejercicios de flexibilidad articular y aumentá la intensidad del esfuerzo físico en forma progresiva para calentar las articulaciones en las primeras bajadas. Practicá siempre en pendientes y pistas acordes a tu nivel.

 

6 – Hidratate en forma adecuada a lo largo de la jornada.

 

Antes, durante y después de la actividad, tomá líquidos para evitar calambres o deshidratación. Y, en lo posible, consumí algún alimento calórico (dulce, barrita) para no perder la energía.

 

7 - Descansá bien durante la noche.

 

Muchas lesiones también pueden producirse por cansancio, pocas de horas de sueño, un exceso de actividad física o una hidratación insuficiente.

  

Fuente:
- Dr. Carlos Lupotti, (M.N. 82.204), médico traumatólogo especialista en miembro superior.