El reloj biológico y su importancia para una vida saludable

En esta nota te contamos qué es, cuáles son los factores que lo influencian y todo lo que tenés que conocer para saber si el tuyo está en equilibrio.

El cuerpo está sincronizado para despertarnos con la luz solar y descansar cuando cursamos períodos nocturnos. Además, nuestro organismo está preparado para comer cuando hay alimento y ayunar cuando no lo hay. De esta forma el cerebro regula su reloj maestro, el que controla el tiempo y los procesos de cada uno de los órganos que funcionan como un solo sistema. Este centro de control vital está influenciado, sobre todo, por los ciclos solares y nuestra exposición a su luz.

Convocada por OSDE, la Dra. Rosana Gorgoza, médica neuróloga, nos explica la función de nuestro reloj biológico central y su importancia para vivir un estilo de vida saludable. Nos comenta que “la industrialización y los avances tecnológicos cambiaron nuestras costumbres y nos volvimos capaces de alargar los días de luz con la invención de la electricidad. Ahora podemos consumir productos las 24 horas del día alterando nuestros ciclos naturales de sueño, vigilia, alimentación y ayuno. Estos cambios no son procesos naturales para nuestro cuerpo y sus ciclos biológicos y metabólicos. Generan ciertos desequilibrios en nuestro organismo y, en ocasiones, predisponen el desarrollo de enfermedades”.

Entre las afecciones que puede desencadenar la ruptura de nuestros ciclos naturales, se registran:

  • Sobrepeso y obesidad.
  • Ansiedad.
  • Insomnio.
  • Ciclos menstruales irregulares.
  • Malestar matutino.
  • Acidez y otros problemas estomacales.
  • Hipertensión arterial.
  • Dislipemia.
  • Migraña.

La Dra. Gogorza remarca que es vital comprender la función de nuestro reloj biológico central, “se encuentra en el cerebro y está formado por más de 20 000 neuronas. Gobierna los relojes periféricos que interactúan con las células de todo el cuerpo y regulan los procesos biológicos de nuestro organismo para que funcionen correctamente”.

 

El cuidado personal y nuestro reloj interno

¿Podés recordar cómo te sentiste la última vez que trasnochaste, que comiste o tomaste un poco de más? La especialista afirma que estas “no solo son noches de mal descanso, es un desorden en todo el organismo y su funcionamiento que genera cambios en nuestros órganos, y puede producir consecuencias como mal rendimiento laboral y escolar, menor concentración, apetito por comida insalubre, falta de voluntad para ejercitarse y cambios de humor, entre otras. Estas costumbres se mantienen en el tiempo, los desórdenes pueden llegar a ser  crónicos con consecuencias aún más notorias”.

Nuestro reloj biológico central es el cronómetro interno que adapta nuestro funcionamiento a las diferentes fases del día. Su presencia es tan importante que es responsable de mantener en equilibrio los distintos ciclos para que nuestro rendimiento y bienestar sean óptimos.

 

Algunas preguntas clave para mantener su equilibrio

Es un sano ejercicio personal que busques algunas respuestas sobre tu bienestar dentro de tu rutina diaria. Para eso, te recomendamos lograr el reconocimiento y un órden de tus actividades haciéndote estas preguntas:

  • ¿Tenés una rutina de horarios para tus momentos de descanso?
  • ¿Cuántas veces comés al día?
  • ¿Hacés actividad física?
  • Durante el día, ¿te exponés a la luz natural? ¿Cuánto tiempo?
  • ¿A qué hora te desconectás de tus dispositivos electrónicos? 
  • ¿Sentís que tus estados de ánimo y humor están en armonía? 
  • ¿Con qué nivel de energía terminás tu día?

En distintos momentos de tu vida podés sentir que hay más desajustes que en otros, y  que esos desequilibrios son normales ya que no son parte de tu rutina sino solo situaciones excepcionales. El problema se agrava cuando esos momentos aislados pasan a ser parte de tu vida y  de tus hábitos. Te contamos cómo reconocer síntomas que aparecen cuando  el reloj biológico no está en armonía:

  • Insomnio.
  • Dificultad para dormir en períodos continuados.
  • Sueño cortado.
  • Sensación de cansancio constante.
  • Trastornos digestivos.
  • Falta de claridad mental.
  • Falta de memoria.
  • Inusuales cambios de humor.

La tecnología y la regulación de nuestro organismo

Uno de los problemas de su uso permanente es la sobreexposición a la luz de las pantallas y su incidencia sobre la salud.
Cuando enfrentamos nuestros ojos al reflejo artificial durante más tiempo del recomendado nos exponemos a la luz azul digital. Los televisores, monitores, teléfonos, tablets y todos los dispositivos electrónicos con sus pantallas confunden nuestro cerebro y a su reloj interno haciéndole creer que vivimos parte del día solar. Este engaño genera una disminución en la liberación de melatonina, la hormona que produce el sueño y baja el ritmo cardíaco preparándonos para los momentos de descanso. 

Entonces, cuando la exposición a la luz artificial es parte de nuestro día, ¿cómo podemos mantener nuestra rutina en bienestar? Te damos 7 tips que te pueden servir:
1| Ubicate, en la medida de lo posible, al lado de una ventana para el desarrollo de tus actividades.
2| Abrí las cortinas para aprovechar al máximo la luz natural.
3| En tus momentos de esparcimiento, disfrutá del aire y del sol.
4| Incorporá en tu casa el uso del dimmers para regular la cantidad de luz.
5| Hacé actividad física por la mañana.
6| Limitá el uso de dispositivos tecnológicos durante la noche.
7| Usar anteojos que bloqueen la luz azul digital.

 

La melatonina, vital para nuestro bienestar

Es una hormona que segrega nuestro cuerpo, y su función es fundamental para poder garantizar el sueño natural que necesita nuestro organismo.

  • Ayuda a conciliar el sueño y a mantenerlo durante toda la noche.
  • Tiene propiedades anticancerígenas.
  • Refuerza el sistema inmunológico.
  • Disminuye el riesgo de osteoporosis.
  • Disminuye las migrañas.
  • Regula las alteraciones de la presión sanguínea.
El orden de nuestros horarios de descanso son fundamentales en relación con los ciclos de luz y oscuridad ya que la producción de melatonina se activa en forma natural ante la ausencia de luz. Por eso la exposición permanente a las irradiaciones artificiales interfiere en su liberación. Te damos algunos consejos simples y prácticos para que logres un buen descanso:

  • Intentá que tu habitación tenga oscuridad total.
  • Desconectá todas las fuentes de luz artificial de tus dispositivos electrónicos, como las luces de encendido del televisor, relojes o aire acondicionado.
  • A medida que el día termina, disminuí el consumo de pantallas.

De esta forma se optimizará la producción natural de melatonina y vas a lograr un descanso reparador como el que necesita tu cuerpo todos los días.

Imágenes nota web Reloj Biologico_Nota


El sol, nuestro aliado para lograr una vida saludable

La luz natural regula nuestro reloj biológico, aumenta la producción de serotonina y mejora el estado de ánimo. Además previene la depresión, mejora el rendimiento cognitivo y ayuda a sintetizar la producción de Vitamina D. Pero, ¿cómo es la mejor forma de lograrlo? Destacamos esta sana costumbre que podés desarrollar:

Intentá al menos tomar un poco de sol por las mañanas. Su efecto nos ayuda a regular nuestro reloj biológico aumentando el cortisol para que comencemos el día alerta, despiertos y con energía. Esto va a favorecer nuestra concentración y atención, mejorando el rendimiento cognitivo y la productividad. También la luz solar favorece nuestro estado de ánimo aumentando la producción de la serotonina, un neurotransmisor que despierta la sensación de bienestar. Cabe destacar que es indispensable que, antes de cada exposición solar, utilices protector solar. Recordá que la exposición debe ser corta, controlada y responsable.

Lograr un equilibrio saludable de las actividades de todos los días depende de una buena planificación sin objetivos complejos. Es adoptar tips sencillos que van a ser la base de tu bienestar en tu rutina diaria. Esas pequeñas costumbres pueden ser la llave para que tu día tenga esos momentos de cuidado personal que no se sientan como una obligación, sino como algo habitual, simple y natural.

 

 

Contenido validado por el Equipo de Auditoría Médica de OSDE / Rosana Gogorza (@TuMenteInfinita)