HPV: ¿cómo prevenir el cáncer de cuello uterino?

Existen medidas para prevenir y detectar esta enfermedad que afecta a las mujeres. Conocé sus manifestaciones más frecuentes y la importancia del diagnóstico precoz.

¿Qué es el cáncer de cuello uterino?

El cáncer de cuello uterino consiste en el crecimiento anormal de las células en la parte inferior
del útero y afecta habitualmente a mujeres entre 30 y 55 años, aunque en los últimos años ha
aumentado su diagnóstico en edades más tempranas.


¿Qué síntomas presenta?

Sus manifestaciones más frecuentes son: sangrado luego de las relaciones sexuales, aumento del flujo vaginal y presencia de sangrado anormal en el período intermenstrual.


¿Se puede detectar precozmente?

Es muy importante tener en cuenta que el diagnóstico y la localización precoz implican la curación completa de esta patología. Para detectarla existen el Papanicolaou, la colposcopia y el examen ginecológico, que en los últimos cincuenta años ayudaron a reducir la mortalidad en un 74%.


¿Cuáles son sus factores predisponentes?

Los factores que indican una predisposición a esta patología son los siguientes:

  • historia personal de muchas parejas,

  • infección por HIV,

  • inicio de relaciones sexuales antes de los 17 años,

  • antecedentes de enfermedades de transmisión sexual (por ejemplo, clamidias, herpes),

  • consumo de inmunosupresores,

  • falta de controles regulares,

  • tabaquismo,

  • afección debida a papiloma virus humano (HPV). Si bien este papiloma está presente en la mayoría de los cánceres de cuello uterino, por lo general en la mayor parte de las mujeres solo provoca alteraciones mínimas, llamadas "lesiones de bajo grado", que se pueden tratar de modo muy eficaz,

  • antecedentes de ingesta de dietilbestrol durante el embarazo.

 

¿Cómo puede prevenirse este tipo de cáncer?

Algunas medidas recomendadas para prevenir esta afección son:

  • usar preservativos,

  • limitar el número de parejas sexuales,

  • evitar actividades sexuales de alto riesgo,

  • no fumar,

  • mantener hábitos de higiene personal adecuados,

  • efectuar el Papanicolaou en forma periódica.

Hoy en día existen, además, vacunas que previenen la infección por HPV.

Para más información, se recomienda la consulta con su médico de confianza.